El pasado Julio, tuvo lugar la boda de Susana y Borja, unos enamorados de Tarifa, querían para su boda algo mágico, que sorprendiese a sus invitados.
Notamos desde la primera toma de contacto que ambos estaban super ilusionados con su enlace y con ganas de mostrar su amor al resto del mundo. Querían que su boda fuese un lugar único, inigualable, sin importarles las barreras que pudiese haber, con esa premisa eligieron un pequeño paraíso en Tarifa. Dimos con un rincón ideal; una pequeña ermita que se encuentra en una colina en Tarifa, desde ese mágico lugar se observan unas grandiosas vistas de las dunas de Punta Paloma, llenas de encanto que nos cautivaron a todos inmediatamente, esa pequeña ermita tiene ese toque especial que ellos buscaban, simplemente fue un flechazo a primera vista con el lugar, en ese mismo instante decidieron que ese lugar era donde querían celebrar su ceremonia, dar el ¡si quiero!.
Otro punto importantísimo era dar con el lugar perfecto para festejar su enlace, Borja y Susana tenían una idea bastante clara del tipo de banquete, ellos querían que fuese una ¡gran fiesta!, algo desenfadado y muy divertido. Así que el lugar elegido tiene ese toque que buscaban, muy de Tarifa, con un césped muy amplio, con pequeño toque «salvaje», pero todo muy cuidado, listo para disfrutar de un día único en la vida de la pareja, ideal para una barra libre hasta la madrugada, consta también una especie de patio Andaluz, con poyetes encalados de blanco, con cojines de colores donde poder sentarse, mesas y sillas de madera, una barra preciosa, todo muy cuidado para poder realizar un banquete con todo tipo de detalles, en definitiva un lugar ideal donde celebrar una fiesta por todo lo alto con toque Boho-chic, a pocos metros de la playa de los lances.
A lo largo del proceso de planificación, mantuvimos contacto diario con Susana y Borja, nuestra tarea es ayudar a quienes nos hacen cómplices de sus historias y deseos, para proyectarlas en la creación de la boda de sus sueños.
Llegado el gran día, hizo un tiempo magnífico, no se movía una ramita, no había viento (tan famoso en Tarifa «El Levante»), se disfruto de la comida, de música en vivo con una banda de Jazz y un grupo de flamenco, dj, saxo, chuches, foodtruck, fotomaton y un sinfín de sorpresas más que los novios planificaron para no dejar de sorprender a sus invitados. Sus caras de felicidad en todo momento nos decía lo increíblemente felices que eran.
Os dejo una pequeña muestra de lo que disfrutamos ese día, mejor con fotos pues no podría explicarlo con palabras la boda tan hermosa que fue.
Fotógrafo: Jose Carlos Saban